Las posiciones culturales de Jacques Chirac, poco conocidas durante largo tiempo, son testigos de la revolución que llevó a la Europa del siglo XX a desprenderse progresivamente de su etnocentrismo y a considerar las culturas del mundo con más interés y respeto. Este retrato cultural presentado en el décimo aniversario del museo permite (re)descubrir la pasión del antiguo Presidente de la República por Asia, y por Japón en particular, o su desconocido interés por las artes precolombinas, evidenciado durante la exposición «Taíno» de 1994 en el Petit Palais.

Más de cincuenta fechas marcan el recorrido de los visitantes, cincuenta puntos de referencia mayores que unen la historia política y cultural francesa, europea o mundial con las posiciones y elecciones profesionales y personales del político francés. Y para ilustrar los desafíos inherentes a cada uno de esos eventos, se han reunido doscientas obras provenientes de colecciones públicas y privadas internacionales (pinturas, fotografías, documentos, esculturas...), representando un diálogo fluido entre el hombre y su siglo.