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Las Prácticas Ancestrales de Mente-Cuerpo (Qigong) de la Medicina China y las artes marciales comparten dos nociones fundamentales: Qi y fortalecimiento (del cuerpo).  La medicina china utiliza métodos únicos de prácticas de mente y cuerpo para cultivar "el Qi (aliento/energía) positivo" del cuerpo, fortaleciendo el cuerpo y previniendo y tratando enfermedades. Por otro lado, cualquier postura o técnica en las artes marciales se basa en la búsqueda de la fuerza.  El objetivo del Qigong en la medicina china es lograr un nivel profundo de relajación y calma. Los elementos clave del entrenamiento son entonces el aprendizaje de la regularización del espíritu, del qi y de la forma, utilizando la intención pero no la fuerza.  A partir de la década de 1980, esta práctica ancestral del Qigong comenzó a notarse en los países occidentales. En Alemania, el Qigong se ha introducido en el sistema de seguro médico. En los Estados Unidos, los NIH (Institutos Nacionales de Salud), financian investigaciones científicas y clínicas fundamentales sobre el Qigong cada año. Podemos ver que el Qigong está ganando terreno en áreas donde la medicina moderna tiende a mostrar sus límites, como la depresión, la hipertensión, la diabetes, la fibromialgia, la enfermedad de Parkinson, la lumbalgia, el síndrome de fatiga crónica o el cáncer.